Esta semana que cae entre los últimos días de marzo y los primeros de abril de cada año es muy importante para la mayoría de los mexicanos católicos, no solo porque los niños salen de vacaciones en esos días, sino porque se lleva a cabo una serie de actividades de carácter religioso en las que interviene toda la familia, la Semana Santa comienza con el Domingo de Ramos, cuando se llevan a bendecir a la iglesia ramitos de palmas, que después se colocan detrás de la puerta de las casas. Del lunes al jueves de esta semana se les conoce como "Días Santos". Los días subsecuentes son Viernes de Dolores, Sábado de Gloria y Domingo de Resurrección, las representaciones que se hacen sobre esto consisten en recrear los últimos días en la vida de Jesucristo, para esto con mucha anticipación la gente que participa en ello se prepara tanto anímicamente como físicamente ya que muchas veces es tan real que se usan clavos verdaderos para crucificar a los participantes además de los golpes y cansancio que esto conlleva.
La Procesión de Semana Santa del Silencio, en que penitentes ataviados con capuchas y faldones negros hasta los pies asegurados a la cintura por medio de cordones de crin de caballo. Para expiar sus culpas, estos fieles caminan descalzos sobre el empedrado, algunos flagelándose la espalda, otros cargando cadenas al cuello, y otros mas llevando hatos de zarzas sobre la nuca, sosteniéndolos con los brazos. A pesar de la seriedad con que los integrantes toman esta ceremonia, esta tradición tan arraigada goza de gran popularidad entre el turismo tanto local como extranjero, que acude cada año a presenciar la celebración del Viernes Santo, procesiones parecidas se efectúan en varios lugares de México.
No hay comentarios:
Publicar un comentario